25 de enero de 2011

el hilo


¿Y si diese un saltito
al ver una curva peligrosa
en mi camino?


¿Sería recomendable conocer la trayectoria de nuestra bola antes de caer en el siguiente agujero?
¿Es mejor dejar que nuestro libre albedrío brinque como quiera?
¿Existe el destino?

Hoy daría lo que fuera por poder destejer parte de ese hilo más que por saber donde irá a parar la madeja. Lo que pasa es que los nudos son difíciles de deshacer.




(Dónde irán los besos-Víctor Manuel)

5 comentarios:

Blogboreta dijo...

Uf... qué pregunta, ¡¡ no tengo ni idea de calcetar !!! :p

Muas!!! :*

TORO SALVAJE dijo...

Protégete de las curvas peligrosas.
Siempre.

Saludos.

Belén dijo...

Yo ya he dejado (o estoy aprendiendo) a dejar que el hilo me lleve donde tenga que estar, si total, creo que no podemos modificar el camino...

Besicos

Marina dijo...

La mayor parte de las veces, los nudos se deshacen con la ayuda de una aguja, pica un poco, pero se deshacen
Besos

India Ning dijo...

Eso solo nos vale en momentos de vacío existencial; bajonazos en los que quisiéramos a toda costa que las bolas mágicas o las cartas del tarot, nos indicasen que las tormentas pasarán.
Nada.
Hay que ir tejiendo con esos hilos que azarosamente aparecen en el camino, todo nuestro futuro; aprovechar las casualidades, despedir impedimentos, recibir aire fresco, y saber, conscientemente, que otras mañanas vendrán.

Y para deshacer los nudos, más vale maña que fuerza.